Tener buenas fotografías de productos puede ser un aspecto que beneficie el diseño de tu sitio cuando quieres montar una tienda online. Si no se tiene la habilidad suficiente para realizar buenas tomas y el tacto para generar la idea de la fotografía, el producto que se quiere promocionar no generará el interés necesario en los clientes potenciales para que quieran saber más sobre los productos que tienes que ofrecer y mucho menos permitirá una interacción entre marca y público. Si quieres que tus clientes potenciales se interesen por adquirir un producto, tienes que ponerte en sus zapatos y hacer que las imágenes realmente demuestren al menos uno o dos atributos importantes del producto. Tu objetivo es lograr que con imágenes bien producidas generes confianza acerca de la compra.
Ten en mente que todas las imágenes de productos deben encajar perfectamente en el diseño de tu tienda virtual y de la imagen de tu marca. Para que tengas una idea de cómo realizar estas fotografías de productos, te compartimos algunos consejos para que tus clientes se enamoren de tus productos y hagan compras.
Prepara tu producto
Para tener fotografías de calidad, la complejidad y el tiempo requerido para las tomas dependen en gran medida del tipo de producto que están fotografiando. Algunos de los productos más fáciles de mostrar son objetos sólidos como tazas y juguetes, y lo único que se requiere para que queden impecables son retoques de brillo y contraste para evitar molestas sombras o corregir pequeñas imperfecciones.
Por el lado contrario, productos como ropa y artículos que sean flexibles pueden requerir bastantes retoques para evitar arrugas y dobleces. Una simple imperfección puede ser la diferencia entre si la fotografía parece de un estudio fotográfico o hecha por un aficionado intentando apuntar y disparar una cámara sin ningún plan de toma.
Cualquiera que sea el producto, siempre inspecciónalo cuidadosamente para que no tenga manchas, polvo, arrugas y otras imperfecciones que puedan arruinar una buena toma.
Ilumina el set
Para obtener una buena fotografía, tener una excelente iluminación es esencial. Afortunadamente, varios productos no necesitan un gran equipo de iluminación para tener una exposición balanceada. Para objetos de un tamaño pequeño, que en promedio sea del tamaño de una cámara digital, puedes crear una especie de reflector hecho en casa con un foco de 30 watts. Si necesitas fotografiar un producto más grande, necesitas tener un set de iluminación más complejo, que en promedio tenga dos reflectores de 60 watts.
Prueba mover estos reflectores con tu cámara en mano y prueba en qué ángulo son más notorias las sombras. Si bien es cierto que las puedes eliminar con programas de edición, requieres que los errores sean mínimos.
La luz natural suele ser un excelente recurso si el lugar en donde eliges llevar a cabo la sesión fotográfica está bien iluminado o es al aire libre. Procura que las tomas sean alrededor del medio día o entre las 4 y 5 de la tarde. La ventaja es que tu set de iluminación te sale completamente gratis.
Prepara tu cámara
Para tener una buena fotografía, aunque tengas la iluminación perfecta y el producto adecuado, obviamente necesitas una buena cámara. Asegúrate de tenerla y no necesariamente debe ser cara o profesional. Las especificaciones básicas que debe cumplir son que tengan: un enfoque manual, temporizador y control de apertura de foco. Estos son controles estándares de la mayoría de las cámaras.
Realiza pruebas de fotos hasta que llegues a tener la exposición constante con brillo y sombras equilibradas para publicarla en tu tienda virtual. Lleva siempre un registro de la velocidad de obturación de tus mejores fotos y utilízalos de nuevo, en tomas de nuevos productos, para mantener la consistencia en tus álbumes.
Entiende los fundamentos de la fotografía y si tus fotos no se ven del todo bien, no te preocupes; es posible que tengas que cambiar varias configuraciones en tu cámara antes de obtener la fotografía que quieras. No te olvides de la resolución de la imagen de la cámara y siempre mantenlo en la más alta posible. La mayoría de las cámaras traen por defecto una resolución mediana (1500 x 850 pixeles).
El balance de blancos es otro aspecto básico; debes ajustarlo dependiendo del tipo de luz con el que estés trabajando. La mayoría de las cámaras tienen las opciones incandescente, fluorescente, luz solar directa y ambiente nublado. Debes ajustarlo dependiendo de las condiciones ambientales con las que estés trabajando. Si el balance de blancos está apagado o deshabilitado, seguramente tendrás fotografías brillantes en exceso o con un tono amarillento, especialmente si tu producto es blanco.
Finalmente, no te olvides de especificar el formato de imagen adecuado para tu sitio. Si sólo tomas estas fotografías para tu tienda virtual, entonces te recomendamos que el formato sea JPEG de alta resolución. Te recomendamos investigar las opciones de tu cámara y en qué formato guarda las imágenes de manera automática.
Edita tus fotografías
No por ser el último aspecto es el menos importante; por el contrario, es quizá el tema más delicado que tratar. El momento en el que utilizas el editor fotográfico define qué tan real se verá tu producto. Si has conseguido que la iluminación sea perfecta y tienes una cámara profesional, ¡excelente!, lo único que necesitarás son retoques básicos de sombras e imperfecciones mínimas.
Es indispensable que si no tienes un fondo definido para tu fotografía, lo mejor es que sea completamente blanco o verde (si tu producto es de uno de estos dos colores, evita mezclarlos) con el objetivo de poder eliminar por completo el fondo y poner otro diseño sin afectar la toma del producto.
Algunos de los mejores editores de fotografías son Adobe Photoshop, CorelDraw e Illustrator. Muchas personas también utilizan efectos artísticos y editores de mapas de bits para manipular sutilmente las fotografías. Puedes crear ilusión de profundidad para imágenes de comida, joyas, lentes, relojes, etc.
Utiliza tu smartphone
Los smartphones son completamente fáciles de utilizar y bastante buenos. Teléfonos como iPhone 5S o 6 tienen una excelente cámara, son bastante útiles y afortunadamente existen apps de fotografía complementarias para editar tus imágenes de manera casi profesional.
Gracias a sus accesorios como tripié y distintos lentes, un smartphone puede funcionar como una cámara de excelente calidad. La ventaja es que quizá este dispositivo ya lo tienes y no necesitas invertir gran cantidad de dinero en adquirir sus accesorios.
La calidad de las fotografías de tu tienda virtual depende del tiempo que pases tomándolas, editándolas y publicándolas. Vale la pena que tengas fotografías de productos que realmente demuestren qué es lo que el cliente va a obtener, sin engañarlo. Genera confianza, gana clientes y posiciona tu marca gracias a las excelentes fotografías publicadas en tu sitio.